domingo, 29 de mayo de 2011

CAPÍTULO 1x09: EL MAPA



Alfonso llegaba a casa a eso de las doce y media de la noche. Los niños aun no se habían ido a dormir, no podían dormirse, sabiendo que Alfonso no estaba y que posiblemente le había pasado algo.

Alfonso explicó a los niños el motivo de su tardanza y de su pequeño ‘accidente’:

– Siento haber llegado tan tarde, os dije que vendría temprano y os he fallado. Espero que sepáis perdonarme. – Dijo Alfonso
– No pasa nada Alfonso, pero estábamos muy preocupados, pensábamos que te había pasado algo. – Dijo Sandra mas tarde.
– Si, es cierto, cuando venía de regreso al orfanato, el coche se quedó atascado en un agujero y estuve varias horas parado sin poder arrancar el coche, pero suerte que al final me ayudó un chico muy majo que pasaba por allí  y pude volver.
– Y por aquí que tal? Os habéis portado bien? – Dijo Alfonso a continuación.
– Sí, nos hemos portado muy bien y no hemos abierto a nadie, como tú nos dijiste.

Los niños, decidieron ocultar a Alfonso la visita del guardián. Pero no son los únicos que ocultaban algo, Alfonso también ocultaba cosas a los niños, pero se lo ocultaba porque no quería asustarles, no quería meterles miedo.

Cuando Alfonso se quedo estancado en el agujero, se encontró en el suelo un mapa. Era un mapa bastante viejo, había un punto rojo señalado. Pero el mapa contenía un nombre en la parte de atrás. Se trataba de Miguel Ángel Herrera Márquez.

Alfonso, se quedo boquiabierto al ver que en la parte trasera del mapa, al lado del nombre, había restos de sangre. Por lo que es probable que el dueño de ese mapa, estuviera muerto ya.

El leñador, se guardó el mapa en el pantalón. Comenzaba a sospechar, que en ese bosque pasaban cosas muy extrañas. Y no podía dejar que a los niños les pasase nada.

Por la mañana…
Roberto y Sonia, seguían encerrados en la sala. Hace días que intentaron escapar y ahora les está trayendo grabes consecuencias. Pero ellos, están dispuestos a hacer lo que sea, para recuperar a sus hijos y para recuperar su antigua vida.

– Dejadme salir! Necesito ver a mis hijos! – Dijo Sonia llorando
– Tus hijos están muertos y enterrados, nunca más los vas a ver. – Dijo uno de los hombres de negro ­– Y si sigues insistiendo te vamos a tener que matar a ti también.

Gerardo llegaba de casa de Sonia y Roberto. Después de buscar durante varios días por toda la casa, no ha encontrado nada más que un simple nombre. Así que Gerardo, fue rápidamente a hablar con Sonia y Roberto.

– Hermanita, hermanita… ahora me vas a decir rápidamente quien cojones es Nicolás.
– Pero como has podido hacernos esto a nosotros, a tu familia. Como has podido ser tan cabrón. Porque nos haces esto?
– Cállate imbécil, aquí el que pregunta soy yo. Quien coño es Nicolás?
– Vas listo, si te piensas que te voy a decir quién es.

Gerardo se enfureció mucho y pegó una bofetada a su hermana. Cogió de nuevo el coche, camino a casa de Sonia y Roberto para buscar más pistas sobre la identidad de ese tal Nicolás.

En el orfanato, las cosas no estaban como para tirar cohetes. Los niños parecían estar más felices y contentos. Alfonso no había podido dormir, no podía dejar de pensar en el mapa, en ese lugar, en lo que se escondía allí… y sobretodo no podía dejar de pensar que en ese bosque habían matado a un hombre.

Alfonso, tenía claro que eso no iba a quedar así… Estaba dispuesto a investigar todo lo que escondía el mapa. Si ese lugar estaba marcado allí, sería por que se escondía algo importante. Algo tan importante como para haber matado a una persona.

El pobre hombre estaba hecho un lio, a lo mejor aquel orfanato en mitad del bosque, no era seguro. A lo mejor los niños podían morir. Alfonso no se podía quedar de manos cruzadas mientras en las inmediaciones del orfanato se comenzaba a matar a gente.

1 comentario:

  1. Pues acabo de leerme unos cuantos y la verdad es que son buenos estos capítulos!

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