lunes, 7 de noviembre de 2011

Volver a creer... Volver a tener FE.

LOLY LEYVA: DIARIO DE UNA CANTANTE.

¡Hola a todos, lectores! Hoy vengo con algo un poco más serio, algo que me ha hecho reflexionar, algo tan importante, cómo es la FE.
Soy Cristiana, devota aunque no practicante, pero sí creo en Dios... o creía, porque reconozco que hace casi un año, me enfadé mucho con él.
Veréis... Yo siempre he creído... nunca he ido a misa ni nada de esto pero siempre me he encomendado a Dios en todas mis difilcutades, cosa que supongo que hacemos casi todos. No he pisado demasiadas veces las Iglesias ya que los curas no me gustan mucho (Considero que los curas y Dios tienen poco que ver, pero en fín...creencias de cada cual).
Digamos que creo en Dios (en algo hay que creer, no?) pero NO en la Iglesia. Pocos religiosos quedan con bondad verdadera y ayuda al prójimo... ya ni el Papa, que el Vaticano es la potencia económica más grande del mundo, pero en fín, esa es otra historia y quizás otro debate muy amplio....

La cosa es, que yo siempre me he encomendado a Dios, en Semana Santa siempre he salido acompañando a Cristos y Vírgenes, en mi monedero nunca falta alguna estampita de algún Santo milagroso, en mi casa tampoco faltan figuritas y alguna que otra velita para peticiones... etc.
Pero comencé a dudar de mi fe, cuando le diagnosticaron a mi padre en Julio del año pasado un Cáncer de Pulmón Terminal.
Al principio, me encomendé a todos los Santos que encontré... recé, compré medallas, velas especiales.... todo. Y un buen día, nos topamos con la causa de la Beata Petra de San José, Madre de los desamparados y fuimos al Monasterio de San José de la Montaña, que está aquí en Barcelona y ni sabíamos que eso existía... Aquello es otro mundo, parece un pueblo antiguo liderado sólo por monjitas que además son las mejores personas que he conocido en mucho tiempo.
Reconozco que mi afán por que mi padre se curara me llevó a comprar reliquias del hábito con el que enterraron a la Beata (favor que nos hicieron las monjas, regalándonos el primero para mi padre) y se lo colgué a mi padre con un apósito en el pecho, dónde estaba "El Bicho".
Reconozco también que invetigué toda la obra de la Beata y la trayectoria del Monasterio... que compré medallas, más velas, que recé las novenas cada día agarrada de la mano de mi padre mientras él dormía en el Hospital a la luz de una vela (Yo no sé cómo no le prendimos fuego a la habitación, las enfermeras flipaban....).
Y reconozco también que cuando murió, pensé que todo aquello no había servido para nada.
Mientras duró su enfermedad, cogimos un fajo enorme de folletos de la causa de Beatificación de la Beata Petra por sus milagros y los repartimos por el hospital. Como "viviamos" allí (yo no volví a mi casa mientras mi padre estaba en el Hospital ni a ducharme) pues los repartíamos por las plantas, hablábamos con quién creíamos que necesitaba un poco de fé... y luego ya vino el comprar rosarios, postalitas y medallitas para dárselos a aquel que lo necesitaba.
Mucha gente se aferraba a aquella fe, sobretodo cuando estuvimos casi 1 mes en el Pere Virgili en el área de terminales... Allí incluso regalaba mis propios rosarios, los que yo llevaba en mi cuello y con los que yo rezaba, cuando veía a alguien realmente desesperado. Mi hermana y yo nos hicimos conocidas en ambos hospitales, en el Pere Virgili y en Hospital del Valle Hebrón y nos auto denominábamos en broma (La Orden del Rosario).
Muchas personas venían a hablar con nosotras contándonos su experiencia o dándonos las gracias por llevarles esa fe.
Almenos durante el proceso y mientras nos aferrábamos fuertemente a nuestra fe, hicimos mucho bien a otras personas.

A mi padre, durante su enfermedad, lo llevamos al Monasterio varias veces y él se sentía agradecido y en paz de estar allí. Miraba a la cara al Cristo, a San José y charlaba mentalmente con él pidiéncole sus oraciones, aunque nosotras no sabíamos qué pedía... pensabamos que, al igual que el retso de nosotras, pedía por su sanación. Pero parecía ser que no, que sólo pedía una muerte digna y apacible, pues él sabía que para él no había sanación. Pero nosotras nos empeñábamos en sanarlo.... peticiones, flores en el altar, charlas con las monjas, rezos y más rezos...
Pero después de 4 meses y algo... se nos fué. En el mismo momento en que comenzaba a expirar, mi hermana y yo comenzamos a romper todos los folletos de la causa de la Beata Petra, le arrancamos del pecho los apósitos con la reliquia milagrosa, le arrancamos las medallas, rompimos los Rosarios, pisamos las postales y hasta tiramos las figuritas..... SI, ME ENFADÉ CON DIOS.
Dejé de creer, dejé de visitar a las monjas, dejé de rezar y sólo sentía un profundo rencor hacia "aquel" que se había llevado a mi padre. Nada me consolaba, nada me servía y no quería ver ni un Santo, ni una postal n una medallita, ni de lejos. Mi hermana "Castigó" a todos los Santos y los puso en lo alto de una estantería, mirando hacia la pared. No queríamos saber nada de ese supuesto Dios que nos había abandonado....

Aunque curiosamente, el anillo que tenía con la pequeña imagen de San José, no me lo quité. Y no sé por qué. Poco a poco, con el paso del tiempo e intentando sobreponerme de la pérdida de mi padre, cosa que todavía no he conseguido, volví a encomendarme a Dios en contadas ocasiones. Poco a poco volvimos a poner un pequeño altar en casa con los Santos, pero esta vez con las cenizas de mi padre en el centro... y en fín, volvimos a retomar un poco esa FE.
Si bien todavía no me he reconciliado del todo con Dios y en los momentos difíciles NO me encomiendo a él si no a MI PADRE, creo que poco a poco está volviendo a mí la fe.

Coincidiendo con que va a hacer el primer año de su muerte, mi hermana tomó el valor necesario y fue ayer al Monasterio de San José de la Montaña a hablar con la Madre Nuria para hacerle una misa especial a mi padre en su primer año como difunto. Mi padre sí que era muy creyente, al igual que mi madre y es algo que "le debemos". Desde la muerte de mi padre ninguna había ido al Monasterio.
Al llegar allí, la recibieron entre abrazos, besos y alegría pues se acoradaban de ella perfectamente. De hecho, se acuerdan de toda la familia. Nos han concedido lo que pedimos para la misa de mi padre, pues ya digo que es una misa "especial".
Y de ese modo, ha vuelto a llegar a mis manos el folleto informartivo de la Beata Petra de San José y su causa de canonización por sus "milagros".

En todo este año de "reconciliación con mi fe" y tras superar mi mega enfado inicial, me he dado cuenta de que, de alguna forma, Dios, la Beata o quién sabe qué o quién SI que intercedió por mi padre y respondió a todos nuestros rezos, oraciones y peticiones.
Cuando le diagnosticaron el Cáncer a mi padre nos dijeron que no le daban ni 2 semanas de vida... con fuerza, con ahínco y con fe, duró casi 5 meses.
La muerte por un Cáncer Pulmón no es nada agradable pues lógicamente, el pobre enfermo se ahoga.... mi padre entró casi solo en coma y murió tranquilo y en paz, sin enterarse de nada y sin ningún atisbo de dolor o sufrimiento en su rostro...
Mi padre andaba, hablaba (aunque en susurros), se movía y comía hasta el último de sus días...

Valorando todo eso, llegué a la conclusión de que si su destino era marcharse de una forma u otra, quizás todo ese empeño, esas súplicas y esas "buenas acciones" habían tenido su recompensa logrando que mi padre pudiera disfrutar de los suyos en la última etapa de su vida y nosotras con él y de que además, tuviera una muerte placentera sin ningún tipo de sufrimiento. incluso le dio tiempo a arreglar sus papeles con los médicos, sabiendo cuando iba a morir y de qué forma... Era un hombre luchador, como buen legionario y protegió a los suyos hasta el final. valiente como pocos.
Dios, la Beata o como digo, quién sabe qué o quién, le concedieron tiempo, fuerzas y ganas para decidir cómo quería terminar su vida y cuando... y así lo hizo.
Eso, me reconfortó y hoy por hoy, todavía me reconforta, aunque sea un poquito.
En el transcurso de esos casi 5 meses meses de Hospital vi sufrir y morir a muchas personas de formas horrorosas y yo sólo pedía que mi padre no se fuera así... y no lo hizo. Ojalá todo el mundo, pudiera partir de la forma tan calmada y placentera que lo hizo mi padre, sin rastro de sufrimiento en su rostro... estaba tan guapo cuando entró en coma.. volvía a ser él, plácidamente dormidito.

Creo que todo esto, debo de gradecérselo a Dios. Ya no sé exactamente si a San José, a la Beata Petra, a Dios en sí, a mi fé, al destino.... evidentemente a los médicos, en especial a mis amigos especialistas que se volcaron en él así como todo a todo el equipo de enfermeras y auxiliares les agradezco su trato y su lucha durante el proceso, pero en el momento de su final... creo que en el fondo, algo le tengo que agradecer al "cielo".
De esa forma, creo que vuelvo a reconciliarme con mi fe. En su momento, me compré el libro de la vida de la Beata Petra, pues me parecía muy interesante, pero no me lo leí. Ahora quiero hacerlo. Antes de la misa, volveré al Monasterio a visitar a las monjitas pues lo cierto es que son estupendas, te saben escuchar y aquello es un remaso de paz. He recuperado mis postalitas, mis papelitos de la novena... y poco a poco voy encendiendo velitas y demás.

No sé si todo esto, al fin y al cabo, sirve para algo... la mente es lo más poderoso que poseemos y quizás es sólo la creencia lo que provoca las cosas... pero... en algo hay que creer, ¿no?.
No hay día que no hable con mi padre, pues QUIERO CREER, que hay algo más allá de la vida. Así que de la misma forma, me encomiendo de nuevo a Dios en todas las dificultades de mi vida.
Quizás pueda ser una LOCA más... pero si esa fe me ayuda a mantenerme cuerda dentro de éste infierno a lo que llamamos vida, pues la mía ciertamente no es nada fácil, me doy realmente por satisfecha y me ahorro el Psicólogo.

¿Creer o no creer?. Yo he decidio creer... pensar que hay algo más, que somos energía después de que acaba nuestra vida mortal y de que hay alguna fuerza superior a nosotros mismos, que nos ayuda de una u otra forma. Yo he decidio TENER FE... encomendarme a Dios y a cuantos Santos me encuentre por el camino.
Por eso me reconcilio con esta Beata, con San José y con las monijtas... por eso me reconcilio con mis creencias y vuelvo a mirar las imágenes de Vírgenes y Santos sin rencor. por eso, enciendo hoy una vela para que alumbre mi camino.

¿Loca? quizás... pero todo en ésta vida pasa por alguna razón. No creo en las casualidades, todo tiene un por qué y todos los actos tienen unas consecuencias. Quizás el retomar mi fe no me cambie la vida, pero quizás sí que dé paz a mi interior.
Mejor eso que los antidepresivos... ¿no?

Un besito para todos lleno de luz y energía.
Loly ;)

8 comentarios:

  1. Joder Loly que fuerte todo lo que cuentas, madre mía. Se me encoge el corazón solo de pensar en tus vivencias. Gracias por compartirlas con nosotros. Eres muy grande.

    ResponderEliminar
  2. Siempre consigues emosionarme.
    Grasias linda, además de bonita sabes cómo llega al corason de las personitas

    ResponderEliminar
  3. Gracias, que más puedo decirte.

    ResponderEliminar
  4. Yo tambien necesito reconciliarme con Dios. Tambien he flaqueado muchisimas con mi fe y creo que es hora de tener una charla con él. gracias por compartir esto Loly. muchas gracias.

    ResponderEliminar
  5. Loly me has ayudado mucho con tu publicación. te sigo mucho a través de facebook aunque pocas veces te escribo porque sé que vas muy liada contestando a tanta gente. pero en ésta ocasión esto que has contado me ha servido de muchisima ayuda. Yo estoy pasando por algo delicado en mi familia y ya no sé a qué Santo rezarle pues tambien soy devota y siempre lo he sido. yo tambien confieso que siento flaquear mi fe pero voy a ver qué esto que cuentas de la beata Petra y a ver si de verdad hace esos milagros que nos cuentas.
    gracias por esta confesión, tienes un cotrazón enorme. animo y muchos besos.

    ResponderEliminar
  6. madre mia loly es precioso y maravilloso lo ke has escrito me has emocionado mucho!

    ResponderEliminar
  7. superstar, bravo por ti! ya te lo dije en facebook. me hiciste llorar!

    ResponderEliminar